TECLADO GAMER REDRAGON K550 YAMA MECANICO/RETIRAS EN NUESTRO EN ROSARIO

NO PERMUTAMOS - Estamos en SALTA 2889, entre RICCHERI Y OV. LAGOS (ROSARIO) Lunes a Viernes de 10 a 13 y de 16 a 19.30hs. Sábados de 10 a 13hs y de 17 a 19 hs. TECLADO GAMER REDRAGON K550 YAMA MECANICO. Este teclado en español tiene todo lo necesario: rueda de volumen, teclas multimedia dedicadas, USB Pass Through ubicado en la parte posterior del teclado, reposamuñecas desmontable y 12 teclas G completamente configurables. ILUMINACIÓN RGB CHROMA Como su nombre lo dice, este teclado posee retroiluminación RBG configurable para el confort y gusto del usuario. con posibilidades de guardar hasta 5 perfiles dentro de la memoria interna del Yama. SOFTWARE INDEPENDIENTE El software independiente del Redragon Yama cubre todos los aspectos configurables del periférico, ya sea su iluminación o las 12 teclas G configurables. No olvidemos que podemos guardar hasta cinco perfiles dentro de nuestra memoria incorporada dentro del teclado. SWITCHES MECÁNICOS OUTEMU El corazón de las teclas de los teclados Redragon están equipados con tecnología Outemu, en este caso, los switches Outemu Purple, de click inaudible y con activación al ejercer solo 62 gramos de fuerza sobre la tecla, hacen del Yama un teclado preciso y apto para cualquier función que le pongamos en frente. CONSTRUCCIÓN Sobre una estructura de aluminio, el Yama es una apuesta ambiciosa de Redragon buscando cubrir todas las aristas posibles para lograr un teclado único. Sus teclas moldeadas por inyección láser de doble disparo y posteriormente grabadas, generan un producto durable y de excelente calidad, ideal para uso intensivo. Su cable de 1.8 metros resiste hasta 12 kg de carga continua y hasta 10.000 flexiones bruscas. La estructura real antisalpicaduras protege al usuario de derrames accidentales sobre nuestro teclado, drenando el líquido por la parte posterior de la base del teclado. Por último, pero no menos importante: todos los teclados Redragon poseen bases antideslizantes que aseguran la rigidez del periférico en el lugar que hayamos decidido colocarlo.